Calefactor eléctrico Solac Modelo 486

Década 70 Pieza del mes
En este mes de invierno, os queremos presentar un calefactor eléctrico, que ha estado presente en la mayoría de nuestras casas, hasta que se popularizó la calefacción central. Es un modelo de cuidado diseño, que se inspira en las formas de las maletas lo que facilita su traslado y con dos patas que garantizaban su estabilidad. Buscaban, ante todo el bienestar en el hogar.
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Tradicionalmente, el combustible más empleado en los sistemas de calefacción ha sido el gasóleo, el fuel oil y el gas natural. La electricidad se añadió posteriormente como elemento generador de calor. Hasta los años 70 no aparecieron estos radiadores eléctricos que en la actualidad junto a la calefacción de gas son los sistemas de calefacción más usados en todas las casas.

La calefacción eléctrica es un proceso en el que la energía eléctrica se convierte en energía térmica. El elemento calefactor dentro de cada calentador eléctrico es una resistencia eléctrica y funciona según el principio del efecto Joule. Este calefactor calienta directamente a las personas y a los objetos de la habitación, como por ejemplo el techo, las paredes, el suelo, muebles, en lugar de calentar el aire. Una ventaja que presenta es el ahorro energético, ya que la energía eléctrica se transforma en calor directamente en las personas en lugar de calentar el aire de los espacios. Además, no genera emisiones de CO2, contribuyendo así al medio ambiente.

El efecto Joule

Un calefactor eléctrico es un dispositivo que produce energía calorífica a partir de la eléctrica. Sirve para obtener calor de una forma cómoda y rápida. El tipo más difundido es el calefactor eléctrico resistivo, donde la generación del calor se debe al efecto joule. Este es un fenómeno irreversible por el cual si en un conductor circula corriente eléctrica, parte de la energía cinética de los electrones se transforma en calor debido a los constantes choques que sufren con los átomos del material conductor por el que circulan, elevando la temperatura del mismo. El movimiento de los electrones en un alambre es desordenado; esto provoca continuas colisiones con los núcleos atómicos y como consecuencia, una pérdida de energía cinética y un aumento de la temperatura en el propio alambre. Es decir que toda energía eléctrica que circula por una resistencia se convierte en energía calorífica. ( 1W=0,86Kcal/h)

Este mismo principio también se ha utilizado para fabricar secadores de pelo, planchas, fogones de cocina, tostadores, hervidores etc. que también encontraremos en el Museo de la Industria armera y que fueron fabricados, algunos, por primera vez, en Eibar.

 La empresa fabricante de este calefactor fue SOLAC, Solaun, Rubio y Ormaechea que estuvo ubicada en Txonta. La empresa lanzó en 1916 su primer producto al mercado, la cafetera industrial. Por aquel entonces también fabricaba planchas tanto profesionales como para el hogar. En 1935 lanzaron la primera cafetera para uso doméstico. En 1945 le tocó el turno  a la plancha eléctrica y ya, en la década de los años 50 los tostadores. Basándose en la técnica aplicada a estos electrodomésticos, más adelante, Solac, comenzó a fabricar aparatos de calefacción.

En el año 2000 la empresa firmó con el grupo Cegasa un acuerdo para que ésta comercializara sus productos, para finalmente pasar a forma parte del grupo Cegasa en 2005.En julio de 2014, tras la suspensión de pagos del grupo Cegasa, es comprada por el grupo Taurus.